CRÓNICA DE LA ESTACIÓN DE PENITENCIA DEL JUEVES SANTO.

Un nuevo Jueves Santo la Antigua, Humilde, Fervorosa y Piadosa Hermandad y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Misericordia y María Santísima de la Palma, realizaba su Estación de Penitencia por las calles de Valdepeñas.

Con 20 minutos de retraso respecto a la hora inicialmente marcada, las 21:30 horas, debido a la evaluación de los últimos partes meteorológicos que se solicitaron y que predecían la presencia de la lluvia para las primeras horas de la madrugada, la Junta de Gobierno de la Hermandad decidía poner la Cruz de Guía en la calle para que la Hermandad realizara el recorrido previsto para esta Estación de Penitencia.

La gran cantidad de fieles y público que se encontraban en las inmediaciones de la Antigua Iglesia del Stmo. Cristo recibieron con aplausos la apertura de la puerta y la presencia de la Cruz de Guía de la Hermandad para dejar paso, rápidamente, al silencio y respeto que marca el discurrir procesional de la Cofradía.

Tras la Cruz de Guía, los dos tramos de nazarenos de luz con cirio tiniebla eran separados por el Estandarte del Stmo. Cristo y el Libro de Reglas, con sus respectivas escoltas. Tras ellos el trío de música de capilla que acompaña el caminar silente del Crucificado y la presidencia del tramo de Xto. Precedían el paso del Señor de la Misericordia el cuerpo de acólitos ceroferarios y turiferarios revestidos con albas, roquetes y dalmáticas negras.

El paso del Stmo. Cristo de la Misericordia estrenaba, en este año 2013, el tallado completo de los respiraderos delantero y trasero, y el tallado parcial de los respiraderos laterales. También se estrenaba el tallado de los baquetones, de las cuatro maniguetas y de los cuatros escudos de los paños centrales de cada respiraderos con los escudos de la Hermandad, del Obispado de Ciudad Real, del Arzobispado de Toledo y del Papa Emérito Benedicto XVI. Un calvario de iris morado exornaba el paso del Señor que caminó de forma cadenciosa y lenta gracias a la labor de los veintinueve hermanos costaleros que conforman la cuadrilla del paso del Señor.

Tras el paso de Xto. se pudo visualizar otro de los estrenos de la Cofradía, el tramo de nazarenos penitentes con cruz al hombro. Un total de 12 cruces de penitente fueron las portadas en la Estación que representan, de manera simbólica, la carga de los pecados de los hombres que son redimidos por la Cruz de Cristo.

El Simpecado (que representa el Dogma de la Inmaculada Concepción de la Virgen María) y sus escoltas abría el cortejo de nazarenos de la Virgen. Tras ellos un primer tramo de nazarenos con cirio blanco. Le seguía el Guíón Asuncionista (que representa el Dogma de la Asunción en cuerpo y alma de la Stma. Virgen a los cielos) con sus escoltas y el segundo tramo de nazarenos, siendo cerrado el tramo de Virgen con el Estandarte Corporativo y escoltas, además de la presidencia de la Stma. Virgen.

Precedían el paso de la Stma. Virgen de la Palma los acólitos ceroferarios y turiferarios, vestidos de igual manera que los acólitos del paso de Xto., incluyéndose también la Cruz alzada Parroquial dentro de este cuerpo de acólitos.

María Stma. de la Palma caminó bajo su palio de terciopelo burdeos, de corte clásico y estilo romántico. Iluminada por su candelería de sesenta luces de cirios de cera y con un exorno floral de clavel rosa palo tanto en los violeteros frontales como en las jarras laterales. La Virgen caminó a los sones de un selecto repertorio musical compuesto por marchas fúnebres y clásicas, y gracias a la labor de los veintiún hermanos costaleros que conformaron su cuadrilla. Estrenaba la Virgen, dentro de su ajuar, un broche en plata que contiene una reliquia de San Francisco de Asís, que ha sido donada a la Hermandad.

Tras el paso de palio, la presidencia religiosa fue ostentada por el Consiliario de la Hermandad, D. Emilio J. Montes Romero y finalizaba el cortejo la Banda de Música “Maestro Emilio Cano” de Membrilla.

Destacar, como momentos más destacados de la Cofradía, su tránsito por el barrio, calle Escuelas, la oración realizada en la capilla de las Madres Salesianas, el regreso por Cárcel Vieja y la entrada de la Cofradía en su vieja capilla con todo el alumbrado público apagado, al igual que en la salida.

El cortejo estuvo compuesto por 161 hermanos distribuidos en las siguientes funciones dentro de la Cofradía: 81 nazarenos, 55 capataces y costaleros, 15 acólitos, 7 monaguillos y 4 servidores de calle.

La Cofradía fue ganando el tiempo de demora de la salida durante el recorrido. Se transitó por las nuevas calles incluidas en el recorrido: Escuelas, Pangino, Balbuena, Cárcel Vieja y Cristo. Cabe destacar el importante aumento de público que se congregó en las calles del recorrido respecto a años anteriores. No hubo que recortar el recorrido ni realizarlo de forma más ligera debido a la posibilidad de lluvia, ya que cuando fue consultado el parte meteorológico cuando la Cofradía transitaba por Cárcel Vieja, se aseguraba la estabilidad atmosférica hasta las 3 de la madrugada. Por ello, la Cofradía regresó en tiempo y forma a su templo, entrando la Cruz de Guía a la hora fijada, la 01:30 h., mientras que la entrada del paso de palio se fijó a la 01:50 h, cumpliéndose escrupulosamente el horario marcado por la Cofradía.

Destacar también que la demora en la salida de la Cofradía no obstaculizó ni influyó en la salida de la otra Cofradía de la Parroquia, pues están totalmente previstos estos márgenes de tiempo que flexibilizan la toma de decisiones en ocasiones de inestabilidad meteorológica como esta.